Rozay, además de tener los mejores adlibs de la historia del rap game, es un triunfador, un jefe ( bawwwssse). En un género musical en el que la autenticidad y el "ser real" lo es todo, él ha seguido con lo suyo, en la misma línea, las críticas y hostias varias que le han caido no le pesan más que los kilos de magra que le cuelgan ( sobrepeso que pasa factura y que le han costado ya 2 infartos ).
Y no es para menos, es posiblemente el mayor fake rapper de la historia, un ex-segurata haciendo mafioso rap. Y el lo sabe perfectamente y lo elude, su música no pretende ser el reflejo de una vida sino gustar, entretener , hacerlo guapo y ganar millones mientras tanto.
Y lo ha conseguido, jet privado y su propio sello discográfico en Warner con varios artistas en nómina, su fantasia en el micro es cada vez más real.
En cuanto a talento, su techo creativo está lejos de crear obras maestras y classics, pero siempre ha sabido acompañarse de beats grandilocuentes y majestuosos, como los del colectivo Justice League, dando salida a increibles composiciones hechas exclusivamente para él, hecho por el que merece la pena consumir su producto.
Como rapper unas veces flojea y otras se lo hace guapo, no tiene muchos skills pero si un gran carisma. God Forgives, I Don't sigue en la misma línea que sus 4 anteriores referencias.
Tenemos bangers de buen gusto en "So Sophisticated", con un inspiradísimo Meek Mill que hace alarde de un flow y unos punchlines brutales; y en "Ice Cold", un hit veraniego en toda regla.
Lujo, brillo, glamour y ostentación se desprenden de standouts como "Ashamed", con un sample rollo Miami Vice rescatado por Cool & Dre, y de "Presidential" con un Pharrell que vuelve a ir sobrado, sacando la mejor version de Ross.
En "Sixteen" cuenta con la aparición estelar de Andre 3000, que nos muestra una vez más el arte del storytellin' evocando un verano de su adolescencia en el mejor tocho que ha soltado en los ultimos años, cosa fina, a la vez que nos dice porque es uno de los god MC's.
Despropósito, cagarro, engaño y verguenza ajena es lo que le viene a uno a la cabeza al escuchar "3 Kings", un fiasco lírico sobre un buen beat de Jake One donde podemos ver cagarla a Dr.Dre ( el que más pena da ) y a Jay-Z en la gran decepción del album.
También son para el olvido temas repetitivos como "911" , "Hold Me Back" y la explícitamente fallida "Diced Pineapples".
No ocurre así en "Triple Beam Dreams", uno de los temas más oscuros y el único que hace justicia al título del LP, con Nas escupiendo knowledge y Rozay mostrando la mierda que el crimen deja en las calles.
Además creo que estamos ante el disco mejor producido que ha sacado Officer Ricky, suena impecable de principio a fin excepto por eso cortes de trap music.
Si es verdad que líricamente puede que suene más genérico y con menos garra que otras veces, pero complacerá tanto a los fans del rapper de Miami como a los headz que quieran ponerle banada sonora a este verano de 2012.
Un trabajo que no hace más que confirmar que es uno de los pilares del rap mainstream de nuestros dias, un personaje necesario.
Le doy un 7/10.
2 comentarios:
Ya el Teflon Don me dejó buen sabor de boca, y este no iba a ser menos. Para mi en el disco sobra el tema de 3 Kings (¿Su nombre va porque se supone que son los que han hecho mas pasta de cada zona?, o es solo ego?). Buena review.
Saludos.
thanks
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